lunes, 19 de mayo de 2014

En el centro

Sube el sol,
mueren las sombras.
Su fuerza infinita
en el centro del día
incólume arrasa
la piel del invierno.

Abierta la carne,
livianos los huesos,
transparente y firme,
inconcreto y denso.

Libre del deseo,
y la súplica absurda,
y la guerra interna,
y el juicio solemne,
abandona las formas
para habitarlas todas.


No hay comentarios: