jueves, 4 de diciembre de 2008

Lo Venido

Confiado en la corriente sana de las cosas
y en su lógico fragor inmaculado,
dejo libre mi cuerpo caminando
por el mundo que se entrega a cada paso.

Como rueda giratoria, inesperada.
Que reparte con sus giros los motivos,
la energía libre y pura
que arranca de Los Cielos luz y vida.

No hay comentarios: